El barrio Obrero se convirtió en el corazón de la Feria de Cali con el tradicional ‘Agua’e lulo’

La fiesta familiar y cultural devolvió a la ciudad a sus raíces salseras, reuniendo a caleños y turistas en un ambiente de convivencia y memoria.

El barrio Obrero se convirtió en el corazón de la Feria de Cali con el tradicional ‘Agua’e lulo’
    Foto: Corfecali

Volver a la raíz para entender la fiesta
Cali, Valle del Cauca, diciembre 28. La 68.ª Feria de Cali encontró en el barrio Obrero una de sus expresiones más auténticas. El tradicional ‘Agua’e lulo del Obrero’ regresó como una fiesta pensada para la familia, la convivencia y el encuentro ciudadano, devolviendo a las calles el espíritu original de una celebración construida desde la música, el baile y la identidad popular caleña.

Obrero, escenario vivo de la salsa
Reconocido como uno de los bastiones históricos de la salsa en Cali, el barrio Obrero se transformó en un escenario a cielo abierto donde la música en vivo y las expresiones culturales marcaron el pulso de la jornada. Este evento se articula con la estrategia de recuperación integral del sector, impulsada por la Alcaldía de Cali a través del primer recorrido patrimonial de la salsa, una apuesta por resignificar el territorio desde su memoria cultural.

El barrio Obrero se convirtió en el corazón de la Feria de Cali con el tradicional ‘Agua’e lulo’
    Foto: Corfecali

Un barrio que cambia su relato
Más allá de la fiesta, el ‘Agua’e lulo’ dejó un mensaje poderoso: el cambio en la percepción ciudadana sobre el barrio. Andrés Ágredo, asistente al evento, lo resumió así: “Se pensaba que el Obrero tenía un estigma de inseguridad, pero hoy se siente un ambiente cálido, de hermandad y una organización impecable”. La experiencia reafirmó que el espacio público puede ser un lugar de confianza cuando la cultura lidera el encuentro.

Turismo, seguridad y convivencia
El ambiente de orden y tranquilidad permitió la participación de turistas internacionales, entre ellos visitantes de Australia y Puerto Rico, incluidos los alcaldes de Ponce y Arecibo, quienes disfrutaron de la celebración. Elles, turista australiana, destacó sentirse segura y conmovida por la experiencia: “La gente es amable, la música, la cultura… Cali tiene oro”. Un testimonio que refuerza el valor cultural de la ciudad ante el mundo.

La esencia de la Feria sigue viva
Con un operativo enfocado en el baile, la convivencia y el disfrute cultural, la jornada priorizó la experiencia familiar por encima del consumo de licor. El ‘Agua’e lulo del Obrero’ continúa este domingo 28 de diciembre desde las 6:00 p. m., con acceso gratuito, invitando a caleños y visitantes a vivir una Feria que se construye desde la identidad, la memoria y la alegría compartida.

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