Operativos masivos, capturas estratégicas y una alerta creciente por el uso irresponsable de pirotecnia marcan el inicio de la temporada decembrina
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Redacción RMC Noticias
Santiago de Cali, 8 de diciembre de 2025. La noche de Velitas dejó en la capital y en varios municipios del Valle un panorama que combina eficiencia operativa y señales de preocupación social. Mientras Cali desplegó uno de los esquemas de seguridad más amplios de los últimos años —con más de 4.000 uniformados y 44 capturas—, el departamento registró 12 lesionados por pólvora en solo cinco municipios. El balance deja claro que, aunque las autoridades fortalecen su capacidad de reacción, la cultura del riesgo persiste.
Operativos en Cali: control reforzado y capturas con impacto real
En la ciudad, el fin de semana se caracterizó por una vigilancia extendida en zonas residenciales, corredores comerciales y espacios públicos. La Policía Metropolitana reportó 44 capturas, la incautación de 9 armas de fuego y la recuperación de 10 vehículos. Además, la línea 123 atendió más de 6.800 llamadas, la mayoría asociadas a riñas y violencia intrafamiliar, un reflejo de tensiones que se exacerban en fechas festivas. Las autoridades recalcaron que los más de 1.400 comparendos impuestos responden a comportamientos que afectan directamente la convivencia.
Un Valle en alerta: 12 lesionados por pólvora en una sola noche
En paralelo a la operación caleña, el CRUE Valle confirmó que 12 personas resultaron lesionadas por pólvora entre la noche del 7 y la madrugada del 8 de diciembre. Florida, Buenaventura, Tuluá, Buga y Jamundí registraron casos que involucraron desde quemaduras leves hasta una amputación de dedos. Con estos reportes, el departamento acumula 21 lesionados en diciembre, una cifra que supera la tendencia inicial del año anterior. Las autoridades advierten que la presencia de menores entre los lesionados mantiene la preocupación en niveles críticos.
Entre el control y la corresponsabilidad: una región que aún convive con el riesgo
Aunque los operativos en Cali permitieron incautar más de 4.500 unidades de pirotecnia e impedir su comercialización, la realidad departamental evidencia que la prohibición no es suficiente. La combinación de contrabando, venta clandestina y uso doméstico mantiene abierto un frente de riesgo que excede las capacidades policiales. La Secretaría Departamental de Salud insiste en que la prevención debe comenzar en los hogares, especialmente cuando los niños siguen siendo víctimas recurrentes.
Un diciembre que exige más que vigilancia, exige conciencia colectiva
El balance conjunto de Cali y el Valle revela un territorio que avanza en reacción, pero no en transformación cultural. Si bien los operativos muestran resultados tangibles —capturas relevantes, incautaciones y control del delito—, los lesionados por pólvora recuerdan que la seguridad no se limita a patrullajes ni a decomisos. Desde esta redacción se sostiene que la región necesita un compromiso social más profundo: uno que entienda que ninguna tradición justifica poner vidas en riesgo y que la protección de la comunidad empieza antes de que actúe la fuerza pública. Las velitas iluminan la ciudad una vez al año; la responsabilidad de cuidarla debería alumbrarla todos los días.




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